Vitelcom, la intrusa marca blanca de Telefónica Móviles
Fecha Viernes, marzo 05 @ 17:46:31
Tema Telecomunicaciones :: Smartphone
| El sector de fabricantes de teléfonos móviles echa pestes contra Telefónica Móviles que cambia paradigmas de marketing
En el competitivo mercado de la venta de móviles ha entrado un intruso. Es un perfecto desconocido que responde al nombre de Vitelcom. Las grandes del sector, Nokia, Siemens, Motorola, Sony-Ericsson, Alcatel, están que echan los dientes, porque este 'don nadie' fabrica la nueva marca blanca de Telefónica Móviles y durante el último trimestre de 2003 ha vendido nada menos que el 15% de los dos millones de móviles que se pusieron en el mercado.
Acusan al líder del mercado español, que también lo es del vasto universo latinoamericano, de haberse convertido en juez y parte dentro del complejo y competitivo negocio de amores y odios cruzados que es la telefonía celular.
El contencioso se originó a comienzos del pasado curso cuando la operadora tomó una decisión que no tiene precedentes entre las otras grandes compañías internacionales: crear una marca blanca de teléfonos con la que inundar, no sólo el mercado español, sino también el latinoamericano.
Con este fin contactó con el fabricante español radicado en el parque tecnológico de Málaga PTA, Vitelcom. El resultado es una gama, hasta la fecha, de cuatro aparatos celulares, de diferentes prestaciones y precios, que han salido al mercado como marca blanca de Telefónica Móviles.
ARRIESGADA AVENTURA
La compañía, cuyo primer ejecutivo es Javier Aguilera, ha justificado esta arriesgada aventura con el argumento de que los fabricantes convencionales no producen el tipo de terminales y, sobre todo, la combinación de aplicaciones que quiere ofrecer a sus clientes.
Junto a este planteamiento teórico, Telefónica Móviles ha puesto en el mercado otro argumento que tiene mucho más peso. Los teléfonos celulares de la marca blanca tienen precios entre 40 y 60 euros más baratos que los competidores en su gama del resto de los fabricantes.
La operadora se siente cada día más orgullosa de su experimento. Tras un lanzamiento tímido de los primeros terminales, hace ahora un año, y una acogida por los clientes en la que se combinaba la sorpresa y el recelo, con el transcurso de los meses, el crecimiento de las ventas ha comenzado otorgar crédito a una aventura por la que nadie daba un euro.
La alarma de los fabricantes tradicionales ha llegado en el cuarto trimestre cuando Telefónica ha puesto toda la carne en el asador y, tras una intensa campaña publicitaria a favor de su marca blanca, ha conseguido vender 300.000 teléfonos entre octubre y diciembre.
El esfuerzo realizado por el líder español ha tenido tal impacto que ha logrado colocar su nueva marca en el sexto lugar de ventas de terminales de telefonía móvil durante el conjunto del ejercicio 2003.
El primero de este ranking, como ya viene siendo habitual, es Nokia. Sobre un parque de 12,5 millones de aparatos vendidos (la patronal Aniel afirma que se han comercializado 14 millones), la compañía finlandesa ha suministrado cuatro millones.
A distancia le siguen la alemana Siemens con 2,6 millones, la francesa Alcatel con 1,3 millones, la estadounidense Motorola y la sueco-japonesa Sony Ericsson con 1,2 millones de terminales vendidos cada una.
De golpe, en el sexto puesto aparece la marca blanca Telefónica Móviles con 720.000 terminales comercializados.
LOS FABRICANTES ECHAN PESTES
Los fabricantes echan pestes, pero prefieren hacerlo en bajito y en círculos restringidos, porque no en balde Telefónica controla el 55% del mercado celular en España, y tiene una nada despreciable cuota de mercado cercana al 30% en los más importantes países de América Latina.
Recibieron por ello con gran alborozo la formación de una 'asociación de damnificados por el funcionamiento de los teléfonos de Vitelcom'. Esta entidad tuvo un lanzamiento con una repercusión mediática significativa la pasada primavera.
Sin embargo, se ha ido diluyendo con el paso del tiempo y también a medida que Telefónica ha ido solucionando los problemas de los primeros terminales.
Ahora los directores de marketing de las marcas convencionales echan tierra a los terminales de Telefónica con el argumento de que a nadie en su sano juicio se le ocurriría comprarse un coche o unos palos de golf de marca blanca.
Entienden que los jóvenes, los profesionales y los ejecutivos son amantes de las firmas de prestigio y que finalmente serán sólo las personas de un menor poder adquisitivo o de mayor edad las que quieran comprar los aparatos de Vitelcom.
Los competidores de Telefónica, sin embargo, no las tienen todas con sigo.
Algunos ya echan cuentas y calculan que si la marca blanca sigue con el ritmo de los últimos cuatro meses puede acabar el año con una cuota de mercado superior al 15%, lo que significará 1,7 millones de teléfonos vendidos.
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