Amena, el tercer grupo celular, ha decidido pagar la multimillonaria tasa sobre el espectro radioeléctrico, fuente de una de las mayores polémicas en el sector telefónico. Amena seguirá la misma estrategia que Telefónica y Vodafone, que aunque pagaron la tasa, mantienen los recursos legales.
Después de varios meses deshojando la margarita, Amena, el tercer operador de móviles, ha decidido pagar la tasa de 210 millones de euros que le corresponde por el uso del espectro radioeléctrico.
Según fuentes de la compañía, “estamos ultimando la fórmula para pagar la tasa ante la Administración”. Amena era, por detrás de Telefónica Móviles y Vodafone, la compañía más afectada por esa tasa, que desde hace meses ha sido el mayor conflicto surgido en el sector de telecomunicaciones en España.
La tasa radioeléctrica fue creada por el Gobierno español como contrapartida a lo que otros gobiernos europeos habían ingresado al subastar, por cantidades billonarias, las licencias de telefonía móvil de tercera generación, o UMTS. De ahí que el nuevo impuesto se bautizara como tasa del UMTS, aunque afectará a todas las compañías con emisiones radioeléctricas.
En conjunto, la tasa para 2001 sumaba 961 millones de euros, cifra que en su mayor parte correspondía a los operadores de móviles. Después de meses de enfrentamiento, Telefónica Móviles y Vodafone dieron un giro de ciento ochenta grados a finales de noviembre, y decidieron pagar la tasa correspondiente, de 228 millones de euros en cada caso.
Telefónica Móviles y Vodafone, sin embargo, –y como medida de fuerza para conseguir rebajas en la tasa y otras concesiones, como, por ejemplo, más espectro radioeléctrico–, decidieron mantener el recurso contencioso administrativo que ya habían planteado en la Audiencia Nacional contra el nuevo impuesto. La misma estrategia seguirá Amena, que, como Telefónica y Vodafone, mantendrá abierta la vía legal.
El Gobierno, para suavizar la polémica, anunció rebajas de más del 65% como media en el conjunto de la tasa para este año. Las rebajas siguen considerándose insuficientes por la mayoría de las compañías.
Según algunas fuentes, Amena, con menos fortaleza financiera que Telefónica y Vodafone, podría recurrir a un acuerdo con la Administración para un pago fraccionado de la tasa. En cualquier caso “se están buscando fórmulas imaginativas”, según fuentes del grupo.
Venta de antenas
Por otra parte, el consejero delegado de Amena, Belarmino García, aseguró ayer que la compañía cerrará en el plazo de un mes o mes y medio un acuerdo para la venta de 4.000 de sus antenas. Otras operadoras, como Telcel y Optimus en Portugal, y KPN en Holanda, que estaban en el mismo proceso, han decidido recientemente congelar el plan de venta ante la mala situación de los mercados.
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